Solemos citar la lluvia, la nieve y la niebla como los efectos meteorológicos que más afectan a la conducción. Al no reducir la visibilidad, no se suele incluir el viento entre los efectos meteorológicos que afecta a la seguridad vial… pero lo es. De hecho, puede ser peligroso, especialmente si sopla a ráfagas o es muy fuerte.

En los días de invierno será importante que extremes la precaución, adaptes tu conducción a ráfagas de viento que superarán los 100 km/h. De este modo te evitarás sustos innecesarios. Parece una tontería, pero… ¿sabías que cada invierno se producen más de 170 accidentes a causa del fuerte viento o que un 4,5% de los accidentes relacionados con el mal tiempo se deben a él?

Otros fenómenos meteorológicos son más predecibles y puedes prepararte para un día de lluvia, o para una zona con nieve, pero el viento puede producirse en un tramo de la carretera por circunstancias diversas que te pueden pillar de improviso. Estos consejos te ayudarán a conducir con viento con más seguridad.

  1. Extrema las precauciones y aminora la velocidad

Cuando las condiciones meteorológicas se vuelven adversas es imprescindible adaptar nuestra velocidad. Venga de donde venga el viento, la primer amedida es reducir la velocidad, ya que el propio peso del coche, permitirá tener mejor agarre en la carretera.

El gran peligro de combinar velocidad y viento reside en que una ráfaga de viento lateral puede hacer que nuestro coche se desvíe de su trayectoria, y a mayor velocidad, el empuje del viento hará que nos desviemos aún más de nuestra trayectoria. Desde la DGT se aconseja el uso de marchas más cortas, para contar con mayor capacidad de respuesta del motor si fuera necesario, es decir, utiliza un régimen alto de revoluciones en el motor para mantener más fácilmente la trayectoria de tu vehículo.

  1. Atento a la dirección del viento

Otro de los factores importantes que te permitirán hacerte con el coche más rápido es detectar la dirección y fuerza del viento, ya que enseguida podrás reaccionar, no obstante si el viento es racheado puede que tengas durante un momento viento frontal y pases por un valle y tengas un golpe lateral de viento, por lo que no te tienes que confiar nunca.

Es importante controlar el movimiento de las ramas en las copas de los árboles. El lugar hacia el que se desplazan las ramas nos indicará visualmente hacia qué lugar se desplaza el viento. Fuera de ciudad existen mangas de viento, pensadas precisamente con ese fin, el de indicarnos la dirección del viento, y darnos una referencia sobre su intensidad.

  1. El peligro del viento cruzado

Los cambios de dirección repentinos en el viento son quizás el mayor peligro que puedes encontrarte mientras conduces. Para evitar sustos sujeta firmemente el volante, no realices movimientos bruscos, y tratar de corregir esos cambios de dirección para evitar que el viento desvíe tu trayectoria. Es importante realizar movimientos muy suaves y progresivos. Si de lo contrario realizas movimientos bruscos y rápidos y casualmente la ráfaga de viento cesa, adiós muy buenas.

  1. Cuidado con los árboles

La caída de árboles en carretera es un peligro real, de manera que hemos de ser en carreteras de montaña, que circulen por arboledas, y con muchas curvas ciegas. Tampoco te aconsejamos aparcar bajo árboles, pueden dañar la carrocería de tu coche.

  1. Precaución en túneles y viaductos

Debes de tener en cuenta que al entrar en un túnel cesará la fuerza del viento que empujaba a tu coche, y no será necesario que efectúes correcciones. Pero recuerda que, al salir de nuevo del túnel, regresará el viento, esta vez con una dirección desconocida y una intensidad distinta que la que había al entrar en el túnel.

Asimismo los viaductos son lugares especialmente expuestos a la fuerza del viento. Aprovechamos este punto para recordarte cómo circular por puentes y viaductos con seguridad.

  1. Extrema la precaución al adelantar

Los adelantamientos son por si solos una maniobra de riesgo en la conducción, pero sin contamos con viento fuerte, el peligro se multiplica, sobre todo si se trata de vehículos de gran tonelaje (camiones y autobuses). Su capacidad para ejercer como barrera para el viento da lugar a dos situaciones:

  • Si el viento sopla por el costado derecho y adelantas, al emparejarte con el vehículo, tu coche se acercará hacia este, como si te absorbiera. Además, dificultará tu incorporación al carril derecho (debido a que te empuja hacia la izquierda).
  • Si por el contrario el viento sopla por la izquierda, al superar al vehículo te encontraras con el efecto contrario, con que tu coche es empujado hacia el carril derecho.

En ambos casos, sujeta con firmeza el volante, ya que los cambios de trayectoria que provoca el viento en nuestro coche se producen de forma repentina, por lo que este punto será muy importante.

  1. Cuidado los “OVNIS”

En ciudad no es nada extraño que una papelera o un contenedor comience a rodar por la calle en un día ventoso. Además debes tener cuidado con la típica bolsa de plástico “voladora” que puede llegar a situarse en la luna del coche y restarte visibilidad.

  1. Asfalto resbaladizo

Debes tener en cuenta que incluso sin precipitaciones, el asfalto puede estar más resbaladizo de lo habitual. El viento suele arrastrar arenilla a la carretera y hojas de los árboles. Esa acumulación de hojas puede suponer un peligro al entrar en una curva.

  1. Conoce a tu coche

Los vehículos que generalmente sufren más por las ráfagas de viento lateral son aquellos con carrocerías más altas, y con mayor superficie lateral. Es el caso de los grandes monovolúmenes y SUV, vehículos que están de moda pero que son más complicados de controlar debido a su altura y centro de gravedad más elevado. Si tu coche es de este tipo has de ser aún más cuidadoso.

  1. No olvides el mantenimiento

Los neumáticos, son como siempre hemos dicho, básicos en seguridad vial (forman parte del triángulo de seguridad), ya que es nuestro punto de unión con la carretera y si el neumático carece de dibujo, o no tiene la presión adecuada añadirá un plus de riesgo a la situación.

Cómo conducir seguro cuando sopla el viento

 

 

 

Fuente: DGT